viernes, 11 de enero de 2008

El olvido como forma de amar

- El mundo del olvido (indefinible, siempre cambia, olvidos por conveniencia, “comenzamos” sin recordar)

- El mundo del amor

- El mundo de la envidia (comparación)

- El mundo del cansancio

- El mundo de la solidaridad

- El mundo de la socialización







El mundo del olvido


Una vez fue el servidor primero. Luego, fue su olvido.


Una manera de amar es olvidar la forma de amar… amar no tiene forma.


El espíritu no podría soportar todos los recuerdos. El estudio y aprendizaje de los recuerdos deben ser tomados en cuenta sólo en ciertas ocasiones. El espíritu no puede analizarlo todo.

El mundo del olvido se forma de recuerdos que son presentes. El mismo fluir de los recuerdos da lugar a este mundo. La justificación de lo que proponemos tiene un espacio en el mundo de las ideas y vive en el mundo de los olvidos: esos espacios, esas vidas, esos aciertos ya errados, ese color y ese ‘presente-ayer’ del cual no tenemos paradero. Hablar de lo que no recordamos debe ser una manera irresponsable de plantear la cosa, pero sepan comprender que, al recordar un olvido, pues todo mundo de olvido deja de ser.

En este mundo no podemos establecer límites. Mucho menos abrir y cerrar puertas. Decimos que el mundo del olvido es indefinible ya que se encuentra en un cambio constante.


¿Alguien quiere escribir sobre los mundos restantes?... ¿cómo podrían ser?

Aclaración: la línea horizontal es "Gravitación"






1 comentario:

  1. "El olvido como forma de amar"...resume mucho en muy poco,muy buena frase. Gracias por pasar... saluditos!

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